Si, otra vez sopa...Ayer porque un travesti murió mutilado en Flores, en fin a quién le importa su elección sexual, basta con saber que alguien falleció, y fue tan oportuno que eligió (para variar) la hora pico, y la estación más codiciada para este tipo de actos, pero como sabrán a Crónica estos detalles no se le escapan. Hoy martes, problemas con los cambios en la estación de Once provocan que el servicio circule con demoras. Otra vez, todos apretados. Otra vez, sopa. Ver la misma situación, repetirse día tras día, provoca en mi demasiados (como llamarlos)...¿sentimientos? Siento un olor repugnante cuando subo, mezcla de humedad, de calzón sucio, de pelo graso, solo volver a imaginármelo me produce arcadas. A su vez, tener que soportar la humedad condensada en pequeñas gotas cayendo del techo y mojando la única distracción de tan encantador viaje, mi libro, termina de "sacarme".
Un dato: Hoy reclamé la restitución del valor del boleto, ya que la demora excedió los 40 minutos. Como tengo el abono, me dijeron que guarde el comprobante que el valor me será descontado cuando saqué el próximo abono...estem...preferí creerle, veremos que pasa.
En síntesis, nada cambió desde que empezamos con el blog, con las protestas...estoy pensando si organizarnos frente a la plaza servirá de algo. Acaso los del campo, ¿están logrando algo? Está muy difícil. Es vergonzoso ver como se invierten millones de dólares en un tren bala, mientras la ciudad y su sistema ferroviario se cae a pedazos. Pero a quien le importa, no? Es turístico, queda lindo, y llenará los bolsillos de más de uno al poner el boleto a $600. Estos hechos exceden todo tipo de lógica.
Buen viaje para todos! (aunque suene irónico)
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